Artículo de colaboración para Borroka garaia da! Autora: Mareva Mayo
El sistema, la cultura, nos domestica contra la locura. Lima y castra, lo diferente. Lo adiestra en el común denominador del sometimiento al poder imperante, al flujo del capitalismo. Castiga y reprime, el comportamiento que cuestiona y revienta la paz social.
La paz social es un pacto de guerra contra lxs desheredadxs, contra la justicia, contra la verdadera paz, que es la libertad, el rizoma racial, geográfico, sexual y mental, la anarquía.
Sin la locura, somos polvo, somos moldeables, somos objeto, somos siervos, autómatas.
Sin la locura, la identidad se contamina y enferma, deja de desarrollarse. El corazón vive reprimido. Y merodeamos cautivos en un zoológico. Sin la locura, el instinto creador deja de crear, se amolda, obedece, repite, envejece, se pudre.
Sin la locura, se permite que el otro, que la ley de unos sobre otros, las propiedades, las ponzoñas del poder del otro, se pongan encima y nos avasallen.
Sin la locura, se vive con miedo, a ser lo que somos, a tomar lo que es nuestro, a bailar sobre sus tumbas.
Sin la locura se pierde el territorio, sin el territorio, somos objeto de desagüe de las patrias, de los bancos, de los gobiernos, de las escuelas. Sin el territorio y la lengua, somos cotizar de la muerte y del sometimiento, somos esclavos, sudor y sangre y lágrimas, de ahorcados, de castrados, de muertos-vivientes.
Sin la locura la tierra es estéril. La evolución se detiene. Se corrompe el pensamiento, el arte, la política. Sin la locura no vive la música. No se puede sentir ni la belleza de la naturaleza, ni sentir el amor, ni la furia, ni la tristeza, ni el aullido ante la injusticia, ni la resistencia, ni lo multitudinario, ni el poder de lo colectivo, ni de lo que muta. Sin la locura no hay sitio para nadie en el mundo. No queda amor ni futuro, ni presente.
La locura es la radicalización de la individualidad y la semilla creadora de cada vida. Arrebatándose, retumbando, hacia lo colectivo. Un colectivo que tema y reprima a la locura, será un colectivo privatizado por el miedo y los intereses del poder. Será un colectivo de la infamia y la barbarie, la jerarquía, el matadero, la prisión. Será lo que hoy es el país, un corrupto mercado contra la inteligencia y lo común y el amor, rodeado por fascismo policial y monetario, asesinando la vida, haciendo clandestina la justicia, invictxs a lxs que se mueven, terrorista a la verdad.
Borroka Garaia da! 