Tras Marín, algunas reflexiones

Artículo de  colaboración para Borroka Garaia da!.  Autor:  Andoni Baserrigorri

La iniciativa de Marín, tomada por las compañeras y compañeros del Colectivo Nacionalista y el PCPG, ha dado pie a que se puedan (y deban) hacer algunas reflexiones, del momento actual de la lucha de clases en las naciones oprimidas por el estado español.

Antes de nada es obligado subrayar el actual momento del estado que nos oprime como pueblo, nación y genero.

Hasta Manolo el del Bombo es consciente de la seriedad de la situación. Con una monarquía en sus horas más bajas de popularidad y aceptación desde su restauración en 1975, con un sistema político basado en el bipartidismo agotado y con una crisis que no conoce fondo tanto en lo económico como en lo moral, los sectores interesados en la continuidad del proyecto imperialista español tienen sobradas razones para estar preocupados.

La contestación social es creciente y si bien no ha llegado a las cotas que se suponen se debería haber llegado, el cabreo y el malestar es patente en las clases medias, que hasta ahora consumían y callaban. Callaban ante la corrupción que conocían de sobra, callaban ante un sistema que sabían no era democrático, callaban ante los abusos policiales que reconocían y callaban ante la negación de los derechos nacionales de los pueblos oprimidos por “su” estado.

El problema es que en la población “españolista”, no perteneciente a las naciones sin estado y que básicamente lo componía las clases medias a que hemos hecho referencia, esta dejando de ser clase media y ve con profundo miedo y preocupación que su futuro no esta tan asegurado como preveían y que el bienestar del que disfrutaban han visto que era ficticio. España no es ninguna potencia europea ni mundial como creían y tras los años del ladrillo vuelve la cruda realidad de antes de los años 90. El estado español se vislumbra como uno de los estados pobres del sur de Europa (tanto que hacían risas con Portugal y Grecia…) y ellos ven con desesperación como tendrán que volver al estilo de vida de los años de “Cuéntame”.

Este estado de las cosas representa un grave riesgo para los pueblos y naciones sin estado, bajo la bota española, o franco-española como es el caso de Euskal Herria y es que el estado español, en su ansia por sobrevivir, no va a dudar en usar a estas clases medias en darle una vuelta de tuerca hacia la derecha. Estas clases son las que señalan como culpables de la crisis a los inmigrantes, a los parados que según ellos son unos vagos, a los sectores mas desfavorecidos que según ellos se llevan millones de euros en asistencia social, son las clases sociales que escupen a los más débiles y callan ante los más poderosos, son la gente que hace de esquiroles en las huelgas y movilizaciones y en definitiva son las gentes que volverán a votar al PP, porque piensan que lo que hace falta es mano dura o giraran hacia la ultraderecha más declarada de UPyD.

El panorama por la izquierda españolista no es más halagüeño. El PSOE es factor clave en la sostenibilidad del estado y hará lo que le pidan los poderes facticos que haga e Izquierda Unida no es en absoluto referencia ni para la clase obrera estatal ni para los pueblos oprimidos. IU, es otra pata del sistema, la pata socialdemócrata, la pata guay y en ese su papel se siente cómodo y es ahí donde piensa que debe estar, gestionando el capitalismo español tal y como hace en Andalucía.

Es urgente, que clarifiquemos varios conceptos.

1- Dentro del estado español, los pueblos y naciones sin estado estamos condenados a desparecer, bajo la vorágine españolista y del sistema capitalista.

2- Es urgente clarificar, que si queremos conquistar nuestro futuro como naciones libres, ese futuro solo puede ser socialista

3- Consecuente a ello, es urgente saber que la Unión Europea, no va a permitir en su seno ningún tipo de socialismo, por lo que es obligado dar a conocer a nuestra gente y militancia que la salida de la Unión Europea es condición sine qua non para ser naciones libres

4- Es cada vez más obvia la necesidad de que los pueblos y naciones que deseamos salir del estado español, debemos empezar a trazar estrategias conjuntas de tal manera que los poderes facticos españoles tengan “uno, dos, varios Vietnam…” en el sentido independentista y socialista de la expresión.

5- Por ultimo, estas tareas que son urgentes para nuestros pueblos solo las pueden llevar adelante movimientos revolucionarios independentistas y socialistas con una solida formación marxista de su militancia.

Siendo consecuente con esta reflexión que hemos llevado a Marín, se debe hacer un serio análisis del nivel de formación actual de la militancia revolucionaria de los movimientos que se supone deben llevar a delante esta tarea. De formación marxista hablo, por supuesto.

De formación marxista porque solo el marxismo evidencia que el capitalismo en su insaciable voracidad, no solo acaba con vidas humanas esclavizándolas sino también con pueblos y culturas. Solo el marxismo, desde su profundo análisis deja claro que la clase obrera o se libera ella o nadie vendrá a liberarla y para ellos hace falta militar en el sentido vitalista de la palabra, como militaban los bolcheviques de la revolución rusa o los guerrilleros cubanos o vietnamitas de las guerras de liberación. En fin solo el marxismo deja claro que los diferentes reformismos no son sino engaños de las burguesías para que los sectores populares hagan dejación de su misión histórica: La toma del poder y la construcción del socialismo.

El sentido de Marín y el mensaje ha sido ese. Hay que militar y hacerlo en el frente de lucha que cada cual considere que debe hacerlo, pero honestamente y trabajando todos los días, con un sentido vital de la militancia.

Y esa militancia hay que hacerla fuertemente armada con una de las armas más poderosas de las que nos debemos dotar. La formación marxista.

Y hay que darle a esa formación marxista un sentido vital. La formación no es para charlar en tertulias ni escribir panfletos o libretos. La formación debe ser una guía para la acción de las y los militantes que se deben embarcar en esta tarea histórica que es la libertad de nuestros pueblos y su futuro socialista.