Eskerrik asko Ikasle abertzaleak

Autor: Borroka garaia da!

Cuando Euskal Herria empezaba a dejar de ser poco a poco un problema para los estados coincidió con el inicio de la ofensiva capitalista denominada crisis. No es mera coincidencia sino que tiene profundas raíces políticas, nacionales y de clase. En ese contexto el independentismo sufriría un proceso de marcha atrás que aún dura (posiblemente ahora mismo sea cuando menos independentistas ha habido en las últimas décadas).

Pese a que en un principio hubo cierta resistencia en los primeros pasos de la ofensiva del capital (huelgas generales, etc) con el tiempo se fue evaporando hasta llegar al resistencialismo que acumula uno tras otro retrocesos. En términos globales se podría decir que estrategias erróneas junto a la represión unido a la fortaleza del bloque del capital en Euskal Herria ha logrado mediante su hegemonía alejar en esta última década el proyecto de independencia y socialismo de la clase trabajadora vasca mientras que el estatutismo se ha afianzado en su legitimidad frente a la ruptura.

En contraposición a lo que ha ocurrido en otros lugares: que las “clases medias” en proceso de proletarización se han inclinado, al menos en diversos momentos, antes de ser vueltas a absorber, por revueltas y por la confrontación contra el orden, en Euskal Herria, al contrario, han sufrido un proceso de conservadurismo y una alianza de facto entre las capas subsidiarias (con especial relevancia del funcionarado, la aristocracia obrera y la capa social subvencionada) de la alta burguesía en beneficio de esta última para pacificar políticamente a Euskal Herria con la esperanza de no perder estatus social en la crisis haciendo que la clase trabajadora sea la que acumule todas sus consecuencias y que no responda. Lo que se traduce en que gran parte de la pequeña burguesía y la mediana en ausencia de un poder de clase trabajadora vasca con estrategia definida haya sido el colchón que ha aplacado “el conflicto vasco” y que al mismo tiempo ha propiciado que las terribles consecuencias de la ofensiva del capital por las que está pasando la clase trabajadora vasca no tengan traducción política de respuesta y construcción en su debido nivel.

Es en este contexto de derrota y retroceso, desde los bajos fondos del pueblo trabajador vasco se ha empezado inesperadamente de un tiempo a esta parte a cambiar esta tónica. Expresiones del movimiento popular (que también había sufrido un fuerte varapalo) han empezado a ejercer poder popular y ahí tenemos por ejemplo el boom de los gaztetxes que no solo se está conformando con ser una agencia de ocio y tiempo libre sino que con perspectiva de clase trabajadora vasca avanzar hacia una confrontación abierta contra el capital en la construcción de un nuevo modelo. Si la juventud obrera está dando pasos también los y las más viejas del lugar que están saliendo a la calle en una lucha confrontativa por pensiones dignas, a lo que habría que unir también el reforzamiento de las luchas feministas de la mujer trabajadora. Es decir, los márgenes y periferias de lo que sería el núcleo aplacado y en proceso de integración sistémica van levantando la cabeza como avanzadilla de lo que puede llegar a ser algo rupturista frente al poder político concentrado de las instituciones burguesas y los estados.

Es en este contexto cercano también, cuando Euskal Herria estaba totalmente paralizada y dependiente de la burguesía vasca cuando el estudiantado, muy especialmente Ikasle abertzaleak realiza un quiebro contra el estatus quo. Algo que no se lo perdonarían las “clases medias” con aspiraciones y la burocracia de la enseñanza.

Ikasle Abertzaleak recoloca en su lugar al estudiantado no como algo “sectorial” sino como componente de la clase trabajadora vasca que analiza que el modelo educativo capitalista en Euskal Herria está tocando fondo al igual que lo hace el modelo económico capitalista en general. Por lo que por ejemplo señala que la apuesta que está obligada a llevar a cabo la universidad responde a un agrandamiento en la división clasista en nuestro pueblo, por un lado destacaría el pequeño grupo dentro del alumnado que aspira a pequeña-mediana-gran burguesía (una élite centrada en las universidades privadas sobre todo), y luego una gran capa sobrante que pese a tener títulos universitarios de diversa índole responderá a la actual dinámica de desempleo y economía terciaria.

Que los órganos de la UPV no tienen legitimidad y que solo mediante una lucha no institucionalizada se conseguirá con mucho esfuerzo mejoras en las condiciones de estudio del alumnado. Que la universidad pretende avanzar en un modelo capitalista tardío, cosa que no están en la labor de permitir. Que son plenamente conscientes que sin trazar estrategias conjuntas con una comunidad educativa ni un poder popular entero, difícilmente se puede aspirar a construir un modelo educativo que pueda responder a amplias masas de la clase trabajadora vasca, algo que consideran enteramente necesario. O sea, que les es incomprensible construir un modelo educativo sin negar lo que está dado, dar paso a lo nuevo sin negar lo viejo. Que la construcción dialéctica de la Euskal Eskola Nazionala será construida mediante una crítica y no convivencia con el modelo actual. Que el sistema educativo responderá siempre a la superestructura de cualesquiera que sea el modelo de producción dominante, llegando a la conclusión de que sin un cambio a gran escala en las relaciones sociales tendremos imposibilitado crear un modelo educativo propio.

Que es necesario trazar una estrategia conjunta con el movimiento popular vasco y con otros espacios rupturistas dentro de la llamada “comunidad educativa”, haciendo proposiciones de cara a trazar posibles visualizaciones de los que será la Euskal Eskola Nazionala (la construcción de un poder dual). Por lo que el alumnado parte del pueblo trabajador vasco debe comenzar a poner en duda los contenidos educativos que le son obligados a digerir, siendo la autonomía de dichos alumnos organizados en asambleas/espacios autogestionados imprescindible para la construcción de contenidos críticos (producción teórica). Que dichos contenidos deberán contar con la base analítica adecuada para la imprescindible crítica. Crítica a la academia carrera a carrera y facultad a facultad.

Pues bien, todo esto es una bomba para el capitalismo vasco-español, para el integracionismo sistémico, para la academia y la socialdemocracia. Un sistema educativo independiente de la enseñanza capitalista española o francesa y controlado exclusivamente por las necesidades de la clase trabajadora vasca.

De ahí que en los últimos años los que gestionan la UPV ofrecieron trozos de pastel a todas las sensibilidades políticas institucionales dentro del estado de cosas actual (y fueron aceptados), es decir, con tal de que no pongan en duda el modelo universitario/ la superestructura ideológica capitalista. La pequeña burguesía vasca y la socialdemocracia fue su candidata idílica. No permitirían que unos chavalillos hasta el cuello de deberes y explotación del día a día “saboteen” un acto democrático (superen el modelo burocrático universitario), que recordemos dio pasos definitorios en la división social del trabajo después del modelo Bologna, hace unos cuantos años ya, y cierta élite académica no quiere ni querrá darse cuenta de ello. La pequeña burguesía a veces suele ser el eslabón débil de la cadena capitalista, y cada vez que se le ofrecen trozos de poder saltan a la rapiña cual buitres hambrientos, dejando colgada a la que hasta la fecha se suponía que era uno de sus sujetos para el cambio, la clase trabajadora.

Y esto es lo que hay compañeros y compañeras detrás de todos esos “titulares de prensa”. Ikasle Abertzaleak es una piedra en el camino tanto para procesos autonomistas de la mano de la clase burguesa vasca (PNV) así como procesos de marginación del interés de la clase trabajadora en beneficio de las castas acomodadas de la enseñanza.

Es de agradecer el trabajo hacia la independencia, el socialismo y el feminismo que está realizando Ikasle Abertzaleak y su defensa de la clase trabajadora frente a todas las capas burguesas que pretenden aprovecharse de ella en una de sus horas más oscuras.

Que sepa la militancia de Ikasle abertzaleak que el esfuerzo en formación política que ha estado realizando debería sonrojar a los que hicieron de la formación política algo exótico y ajeno para la militancia de base. Que en un momento en el que no se movía nadie, vosotros y vosotras os subíais por los tejados y volvíais a traer la alegría de la lucha. Que si la izquierda abertzale de siempre tuviera algún tipo de esencia, en vosotros y vosotras está bien representada, desde luego mucho mejor representada que en muchos que se llenan la boca de ella o ahora viven de ella. Que pese a que os difaman y llevan intentado joder mucho tiempo siempre habéis estado en vuestro sitio, no habéis atacado a nadie, y sois ejemplo de comportamiento y de cómo tienen que realizarse las relaciones entre los diferentes agentes.

Así que nadie os quite la alegría de la lucha porque en realidad son solo las extrapolaciones de sus propias miserias y derrotas, y la clase trabajadora de este país os necesita para ganarlo todo. Eskerrik asko.